¿Sentís dolor de cuello, espalda o muñecas después de varias horas frente a la compu? No estás solo. Con unos ajustes simples y algunos hábitos diarios, tu home office puede ser cómodo, funcional y cuidar tu bienestar.

Altura de pantalla y silla

La parte superior de la pantalla debe quedar a la altura de tus ojos para evitar tensiones en el cuello. Sentate con la espalda recta, pies apoyados en el piso y rodillas a 90°. Apoyá los brazos para no cargar hombros ni muñecas.

Movete y descansá

Hacé pausas cada 45-60 minutos: levantate, estirá cuello, espalda y muñecas. Alternar entre estar sentado y pararte un rato ayuda a aliviar la fatiga. Respirar profundo y tomar agua también suma.

Organizá tu espacio

Mantené lo que más usás a mano y evitá el desorden. Aprovechá la luz natural y sumá una lámpara blanca para trabajar sin forzar la vista. Un escritorio despejado también ayuda a tu cabeza a descansar.

Pequeños hábitos que suman

Evitar encorvarte, moverte mientras trabajás y ajustar tu mobiliario según tus necesidades hace una gran diferencia. Tu cuerpo te lo va a agradecer.

Nuestros muebles te cuidan

Después de organizar tu espacio, algunos muebles funcionales pueden mejorar tu postura y bienestar:

  • Standing Desk: cambiá entre estar sentado y de pie, mejorando circulación y reduciendo fatiga.

  • Escritorio plegable: ideal para espacios reducidos o para mover tu rincón de trabajo.

  • Apoya monitor: eleva la pantalla a la altura de tus ojos, cuidando cuello y hombros.

Con estos tips y muebles de madera sustentable, tu home office se convierte en un espacio que cuida tu cuerpo, concentración y bienestar.